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Aprovecha tu juventud

Servicio JEF

Pastora Maribel de Valbuena

Miércoles 10-11-2021

1 Timoteo 4:12: “Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza”.

Timoteo era un joven lleno del Espíritu Santo, que amaba servir y poseía una relación con Dios; el apóstol Pablo amaba a Timoteo como un hijo. Si nos damos cuenta, la edad no tenía nada que ver con la madurez espiritual, el deseo de servir y el gran amor que poseía Timoteo por la Iglesia.

El Espíritu Santo estaba formando en Timoteo un hombre de Dios, y esto es un proceso que requiere tiempo, por eso como jóvenes en fuego debemos aprovechar nuestra juventud permitiendo que el Espíritu de Dios trabaje en nosotros y transforme nuestras debilidades en fortalezas.

Dios había escogido a Timoteo por su pasión y deseo de servir, Él no se limitó por las debilidades que podía tener Timoteo; en cambio, lo instaba por medio del apóstol Pablo a nunca considerarse menos por su corta edad. Dios cuenta con nuestra fuerza y juventud para establecer su Reino en la Tierra. Debemos aprovechar el tiempo y servir a Dios, para así encaminar nuestro llamado.

Mateo 9:36-38: “Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor. Entonces dijo a sus discípulos: A la verdad la mies es mucha, mas los obreros pocos. Rogad, pues, al Señor de la mies, que envíe obreros a su mies”.

Como jóvenes nos es necesario conocer nuestro propósito, porque tenemos mucho trabajo, la Biblia establece que la mies es mucha y los obreros son pocos. No podemos ignorar el gran trabajo que tenemos que hacer, Dios ya ha anunciado su deseo porque toda criatura llegue a la verdad, por eso debemos levantarnos y ponernos al servicio de Dios.

Jesús conocía su propósito en la Tierra, Él tenía claro el sufrimiento que debía enfrentar y aún así, movido por la necesidad que había en la Tierra, salió de su trono para venir a salvarnos. Así como Jesús, debemos conocer nuestro llamado y avocarnos a cumplirlo, tenemos que trabajar para atender las necesidades que vemos, igual como lo hizo Jesús.

Éxodo 33:11: “Y hablaba Jehová a Moisés cara a cara, como habla cualquiera a su compañero. Y él volvía al campamento; pero el joven Josué hijo de Nun, su servidor, nunca se apartaba de en medio del tabernáculo”.

Mientras más jóvenes seamos, más fuerzas tendremos para hacer cosas por Jesús. En Éxodo vemos el ejemplo de Josué, un joven que era servidor y buscó a alguien que lo guiara y enseñara; si deseamos crecer necesitamos ser guiados por un tutor o pastor, de forma que podamos ser formados tanto en lo personal como en lo espiritual.

Si nos disponemos a servir y a trabajar para el Reino, nos encontraremos caminando en el propósito de Dios, de esta forma, un día seremos nosotros, quienes en posiciones de liderazgo, formemos a otros.

Números 14: 6-8: “Josué hijo de Nun y Caleb hijo de Jefone, que eran de los que habían reconocido la tierra, rompieron sus vestidos, y hablaron a toda la congregación de los hijos de Israel, diciendo: La tierra por donde pasamos para reconocerla, es tierra en gran manera buena. Si Jehová se agradare de nosotros, él nos llevará a esta tierra, y nos la entregará; tierra que fluye leche y miel”.

Josué y Caleb eran jóvenes que fueron formados a los pies de Moisés, ellos veían la tierra prometida y sabían que Dios los iba a respaldar, de la misma forma en que fueron alimentados y guiados en el desierto, creían que serían apoyados para tomar como suya esa tierra. Venezuela es una tierra prometida y cuando llegue el tiempo de tomarla, necesitaremos jóvenes que sean valientes como Josué y Caleb.

Pidámosle a Dios valentía para tomar nuestra tierra, sirvamos en la casa de Dios y busquemos ser guiados por nuestros líderes y pastores para caminar en la voluntad perfecta de Dios. Tenemos que aprovechar nuestra juventud haciendo cosas que nos formen y nos lleven a cumplir el propósito que está establecido para nosotros.