Ensancha tu visión y crece

Pastor Yobany Blanco

Domingo 21-03-2021

Habacuc 2:1-2: “Sobre mi guarda estaré, y sobre la fortaleza afirmaré el pie, y velaré para ver lo que se me dirá, y qué he de responder tocante a mi queja. Y Jehová me respondió, y dijo: Escribe la visión, y declárala en tablas, para que corra el que leyere en ella”.

Hoy nuestro espíritu debe levantarse al tiempo profético que Dios nos está llamando, porque aunque la visión tarde, debemos esperarla, y caminar y pisar la tierra que Dios nos ha entregado.

Josué 1:9: “Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en donde quiera que vayas”.

Vamos por la salvación de Venezuela, de las naciones, de nuestras familias y de nuestros jóvenes, esperemos el cumplimiento de la visión con paciencia, pero también con determinación.

Génesis 11:1,4-5: “Tenía entonces toda la tierra una sola lengua y unas mismas palabras. Y dijeron: vamos, edifiquémonos una ciudad y una torre, cuya cúspide llegue al cielo; y hagámonos un nombre, por si fuéremos esparcidos sobre la faz de toda la tierra. Y descendió Jehová para ver la ciudad y la torre que edificaban los hijos de los hombres”.

La visión de Dios viene descifrada en un solo lenguaje, el cual debe ser repetido para que sea entendido. Estas personas tenían una ambición personal, y aplicaron los principios del Reino de Dios a una visión propia, lo que sorprendió a Dios, y Él mismo descendió a ver lo que pasaba.

No nos metamos con una persona que tiene una visión de parte de Dios, porque cuenta con Su bendición. Los visionarios tienen la capacidad de enseñarle un lenguaje de fe a otros.

Génesis 11:6: “Y dijo Jehová: He aquí el pueblo es uno, y todos éstos tienen un solo lenguaje; y han comenzado la obra, y nada les hará desistir ahora de lo que han pensado hacer”.

Uno de los principios que estaban aplicando estos hombres, era la unidad, así que lo peor que podemos hacer es atacarnos entre nosotros por no entender la visión de parte de Dios, y considerar que la visión personal es la única correcta. Necesitamos la parte de la visión que otro tiene, todos somos necesarios, y la visión de Dios siempre es incluyente, así que enfoquémonos en defender nuestro lugar en obra que estamos desarrollando.

Los visionarios se unen para ayudar al que está débil. Y lo importante de la visión es cuándo llega el tiempo de ponerla en práctica; hay que caminar en ella. Cuando nuestro espíritu está decaído, nos unimos con el que le gusta hablar de los demás, pero cuando no es así, nos unimos con el que tiene la visión y está avanzando. Un visionario tiene que estar con otro visionario.

Lucas 1:38: “Entonces María dijo: He aquí la sierva del Señor, hágase conmigo conforme a tu palabra. Y el ángel se fue de su presencia”.

Cuando el ángel se le presentó a María, la madre de Jesús, para anunciarle sobre su embarazo, solo recibió la visión y el mensaje, sin entender cómo sucedería. Ella fue obediente y se fue a vivir con su prima Elizabeth, que también había quedado encinta a pesar de su vejez y esterilidad. Ella se quedó bajo su autoridad y cuidado por un tiempo, para que no estuviera en riesgo de abortar, porque el que recibe la visión es quien recibe las piedras.

Nada ni nadie nos hará desistir de ver a Venezuela arrodillada a los pies de Jesús, viene una gran liberación, un aceleramiento de parte de Dios, ¡algo nuevo viene y está a punto de manifestarse! Rompamos los límites, salgamos de esa condición de apatía y ensanchemos nuestra visión y crezcamos. El visionario no ve lo que hay hoy, sabe lo que pasará mañana.

Génesis 15:1: “Después de estas cosas vino la palabra de Jehová a Abram en visión, diciendo: No temas, Abram; yo soy tu escudo, y tu galardón será sobremanera grande”.

La Venezuela que Dios nos ha dado es una tierra en la que fluye leche y miel, y la visión para esta nación es poderosa; ella es la herencia que Dios nos ha entregado. Si la visión para esta nación ha sido grande, será mucho más con nuestra descendencia, en los jóvenes será más grande, porque Dios pondrá una palabra profética de salvación en sus bocas, así que ellos deben volver a predicar el Evangelio con poder.

Isaías 54: 1-5: “Regocíjate, oh estéril, la que no daba a luz; levanta canción y da voces de júbilo, la que nunca estuvo de parto; porque más son los hijos de la desamparada que los de la casada, ha dicho Jehová. Ensancha el sitio de tu tienda, y las cortinas de tus habitaciones sean extendidas; no seas escasa; alarga tus cuerdas, y refuerza tus estacas. Porque te extenderás a la mano derecha y a la mano izquierda; y tu descendencia heredará naciones, y habitará las ciudades asoladas. No temas, pues no serás confundida; y no te avergüences, porque no serás afrentada, sino que te olvidarás de la vergüenza de tu juventud, y de la afrenta de tu viudez no tendrás más memoria. Porque tu marido es tu Hacedor; Jehová de los ejércitos es su nombre; y tu Redentor, el Santo de Israel; Dios de toda la tierra será llamado”.

Levantémonos de ese lugar de tristeza, empecemos a creer la visión que Dios nos ha entregado. Dios nos está embarazando de su visión, porque Venezuela no será llamada estéril, tendrá hijos que no descansarán hasta cumplir con lo que se les ha entregado.