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Jesús trajo consigo un cambio de dispensación

Pastor Javier Bertucci, domingo 28 de octubre de 2024

Los cambios de dispensación traen con ellos un nuevo tiempo para quienes lo esperan, en la fe, esta nueva dispensación trajo a Jesús y Su gracia para dejar de lado la religión impuesta por la ley y comprender que Dios quiere relacionarse con nosotros por medio de Su hijo.

No confundas nunca la gracia con el libertinaje, pues la gracia es lo que Jesús hizo a favor de tu vida con su sacrificio en la cruz. La gracia no es para pecar, es para restaurar por medio de la fe en Cristo y no por una serie de normar religiosas.

Con una nueva dispensación también hay un nuevo nivel de relación, en la cual Dios quiere algo más sencillo pero más íntimo, sin preámbulos sino algo lleno de espontaneidad.

Nuestra historia sufrió un cambio radical cuando Jesús trajo la dispensación de Su gracia del cielo a la Tierra, proveyéndonos de una oportunidad única y maravillosa de acceder a la salvación de manera gratuita y sin requisitos, con un alto precio para el Padre, pero con un resultado eterno y lleno de misericordia, que está disponible para todo aquel que en cualquier momento quiera ser parte de él.

“Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la ley” – Gálatas 4:4 (RV1960).

El pacto y la manera de la raza humana se relaciona con Dios cambió desde que el propósito de la primera venida de Jesús se cumplió, que es ahora en una relación llena de amor y perdón por medio del arrepentimiento en Cristo, sin religiones o preceptos, solo apelando a la gracia de Jesús.

Cuando conoces a Dios, tu relación con Él cambia, dejando de lado el temor para dar paso al amor y la misericordia. Tu misma relación con el Señor puede tener impacto en otros que quieran conocer al Cristo que tú has conocido.

“Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro” – Hebreos 4:16 (RV1960).

Tu estatus o posición en la Tierra, no define tu posición en el cielo y cuando entiendes que eso se basa en que Jesús tomo tu lugar para que tu pudieras estar junto a Él y a Dios, los cambios que esperabas ver comienzan a ocurrir.

“alumbrando los ojos de vuestro entendimiento, para que sepáis cuál es la esperanza a que él os ha llamado, y cuáles las riquezas de la gloria de su herencia en los santos” – Efesios 1:18 (RV1960).

Mantener una actitud de gratitud constante por lo que Dios hace por ti todos los días es un estilo de vida alto y digno que el mundo no entiende hasta que conocen a Cristo.

“Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos), y juntamente con él nos resucitó, y asimismo nos hizo sentar en los lugares celestiales con Cristo Jesús”- Efesios 2:4-6 (RV1960).

Cuando comienzas a creer tu posición en el cielo, tu condición en la Tierra cambia por completo, porque cuando conoces a Jesús todo empieza a tener sentido y un propósito.

Dale a Dios el espacio que merece, y deja que la dispensación de la gracia de Jesús te lleve a vivir los tiempos de abundancia que te aguardan en la fe.