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Profundamente agradecido

Pastor Javier Bertucci

Domingo 27-11-2022

 

 

Quien no sabe agradecer no sabe recibir, y la vida del creyente debe ser de agradecimiento permanente. ¡La vida es un regalo que Dios nos dio en la tierra y como tal hay que vivirla agradecidos! Hay dos clases de personas, los agradecidos, y en la otra parte hay dos tipos de personas, los mal agradecidos y los desagradecidos. Los mal agradecidos son quienes agradecen mal o no saben agradecer, y los desagradecidos son quienes agradecen poco o nada.

Filipenses 4:12:Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad”.

No tenemos la capacidad de entenderlo todo, pero sí de agradecerlo todo. La queja no produce nada, solo nos estanca y extiende el tiempo en aquella mala circunstancia; en cambio, el agradecimiento desaloja las circunstancias difíciles.

Éxodo 16:35: “Así comieron los hijos de Israel maná cuarenta años, hasta que llegaron a tierra habitada; maná comieron hasta que llegaron a los límites de la tierra de Canaán”.

Deuteronomio 8:4: “Tu vestido nunca se envejeció sobre ti, ni el pie se te ha hinchado en estos cuarenta años”.

El pueblo de Israel duró vistiendo y comiendo lo mismo, el tiempo que se mantuvo quejándose, esto nos muestra que la queja no cambia nada, pero en cambio el agradecimiento sí.

Colosenses 4:2:Perseverad en la oración, velando en ella con acción de gracias”.

Salmo 103: 2: “Bendice, alma mía, a Jehová, y no olvides ninguno de sus beneficios”.

1 Timoteo 2:1: “Exhorto, pues, ante todo que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias por todos los hombres”.

Cuando empezamos a agradecer, ya no hay espacio para el odio, y dejamos de cuestionar lo que ocurrió.

Filipenses 4:6: “Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias”.

El dar gracias nos libera, y aunque no nos exima de la circunstancia, lo hace de la presión de la misma. Entendamos que, el afán y la desesperación son falta de agradecimiento.

2 Corintios 2:14: “Mas a Dios gracias, el cual nos lleva siempre en triunfo en Cristo Jesús, y por medio de nosotros manifiesta en todo lugar el olor de su conocimiento”.

Damos gracias, no por la ausencia de problemas, sino porque Dios nos lleva siempre en triunfo. Vivir agradecidos es una decisión que cada uno de nosotros debe tomar. El agradecimiento es el reconocimiento absoluto de que lo que tenemos, lo recibimos de Dios. Quien más agradece es aquel que reconoce que lo que tiene no lo pudo lograr por sus medios y que no lo merecía, pero, sin embargo, se le entregó. Agradecer y disfrutar nos da más vida. Logramos más agradeciendo y adorando, que quejándonos. Cuando agradecemos sentimos paz, y esa seguridad viene de conocer que Dios nos va a ayudar.