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Servicio de oración
Líder José Mena y Capitán Dickson González
Martes 20-09-2021
La oración debe ser parte de nuestra vida, no solo un tiempo en específico en nuestro horario, debe ir más allá de los minutos que le dediquemos a diario. Al salir de nuestras habitaciones, enfrentaremos la realidad, y lo que vivamos en la oración, debe ser suficiente como para hacerle frente a lo que se nos pueda presentar. Por eso, debemos mantenernos en constante oración, para caminar en lo que le pedimos a Dios.
En la oración conocemos al Dios de lo imposible, quien hará que la enfermedad y las deudas retrocedan. Apocalipsis dice que nuestras oraciones son recibidas en copas de oro (Apocalipsis 5:8), eso quiere decir que cada oración que hacemos al Cielo tiene gran valor.
Capitán Dickson González
La oración nos une a Dios, quien siempre está atento a nuestras peticiones. Después de salir de una oración debemos estar repotenciados con la paz y la paciencia suficiente para esperar la respuesta a nuestras súplicas. Mientras esperamos debemos recordar lo importante de no caer en la queja, ni en murmuración, porque eso contra resta lo que oramos.
Líder José Mena
Éxodo 14:2,4,10: “Di a los hijos de Israel que den la vuelta y acampen delante de Pi-hahirot, entre Migdol y el mar hacia Baal-zefón; delante de él acamparéis junto al mar. Y yo endureceré el corazón de Faraón para que los siga; y seré glorificado en Faraón y en todo su ejército, y sabrán los egipcios que yo soy Jehová. Y ellos lo hicieron así. Y cuando Faraón se hubo acercado, los hijos de Israel alzaron sus ojos, y he aquí que los egipcios venían tras ellos; por lo que los hijos de Israel temieron en gran manera, y clamaron a Jehová”.
Dios endurece el corazón del faraón, pero esto generó que los israelitas levantaran su vista a Dios. En tiempo de adversidad solemos ir a Dios, porque conocemos que Él es el único capaz de cambiar la realidad. Hoy, muchos están pidiendo a Dios un cambio de realidad, y así como Él escuchó a los israelitas, oirá nuestra petición.
En esta historia vemos a dos tipos de personas, quienes se quejan ante cualquier dificultad, y quienes se mantienen firmes como Moisés. La oración es el cuarto en el que Dios revela sus planes, así que, cuando vivimos en oración, estamos totalmente confiados; Moisés vivía confiado porque conocía los planes de Dios, y sabía que tenía el control.
Capitán Dickson González
La única forma de no ver lo que Dios nos ha prometido, es renunciando a ello; es necesario que conozcamos la palabra de Dios si deseamos saber cuáles son las promesas que nuestro Padre nos ha ofrecido. La queja en el pueblo de Israel fue lo que hizo que los años en el desierto se alargaran. Debemos entender que la crítica retrasa la bendición.
Es importante mantenernos en gratitud constante, mirando siempre el milagro, y mientras más difícil se torne, es porque está más cerca. Con Cristo no tenemos ningún margen de derrota, por eso es necesario mantener la actitud de confianza en todo momento. Cuando oramos activamos ángeles guerreros que vienen y nos ayudan en la batalla espiritual.
Líder José Mena
Cuando oramos los ángeles de Dios se posicionan en medio de la dificultad para defendernos.
En la noche el pueblo de Dios oía las voces de los egipcios acercándose, sin embargo, el ángel puso una niebla que evitaba que ellos se acercaran a los israelitas. Puede que actualmente oigamos las voces de los problemas, pero los ángeles no permitirán que ellos nos toquen. No importa las voces que oigamos mientras batallamos contra equella circunstancia, prestemos atención a lo que Dios nos dijo, ¡Él cambiará nuestro lamento en gozo!