Project Description

Sueña con tu milagro

(Domingo 26-01-2020)
Pastor Francisco Barrios

Jeremías 29:11: “Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis”.

La fe va a construir lo que estamos soñando; ahora bien, lo que esperamos es lo que soñamos, pero ¿qué estamos esperando? Recordemos que Dios nos va a dar el fin de lo que estamos esperando, si no esperamos nada, no recibiremos nada, pero si esperamos mucho, eso tendremos. Empecemos a soñar porque Dios va a cumplir nuestros sueños, Él tiene pensamientos de bien para nosotros, el problema es que hay mucha gente desesperanzada que no está esperando nada, o dando tiempo a que cambien ciertas cosas en su vida o país para poder tener esperanza, pero resulta que la fe trabaja con nuestra esperanza, ella conquista lo que la esperanza está creyendo.

Isaías 61:1-2: “El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel; a proclamar el año de la buena voluntad de Jehová, y el día de venganza del Dios nuestro; a consolar a todos los enlutados”.

Creamos que nuestra esperanza se va a despertar y que con ella van a resucitar sueños que estaban muertos y que habíamos enterrado y olvidado. Dios tiene pensamientos de buena voluntad para con nuestras vidas, nosotros no somos la pesadilla de Dios, somos su sueño, y Él tiene planes de bien. Dios siempre ha estado anunciando sus sueños para que la Iglesia se alinee a ellos, el problema es que muchas veces queremos las cosas de forma microondas. Todos nacemos con sueños porque a todos se nos dio la capacidad de soñar, imaginar y de poder ver lo que no existe todavía, pero ¿qué quiere Dios? que no nos llevemos los sueños a la tumba, sino que empecemos a soñar para que lo empecemos a ver, y que soñemos lo que Él está soñando, es decir, sus planes de bien que son: sanarnos si estamos enfermos y prosperarnos si no tenemos nada que comer, ¡Dios quiere ver el milagro cumplido sobre nuestras vidas!

Todos quieren ser exitosos, lograr algo grande y ser prósperos, hasta que se dan cuenta que serán señalados y criticados, por eso se requiere valentía para no renunciar a los sueños. ¡Ser exitosos es ser diferente! La gente promedio caminará a nuestro lado mientras no tengamos éxito ni destaquemos, porque si los superamos, nos odiarán. Se necesita coraje y valentía para ganar y para ser exitoso. La gente no habla de los que pierden, habla y ataca es a los que ganan, pero lo realmente importante es que Dios está con nosotros, así que ¡soñemos en grande!

Aun con nuestras ofensas diarias a Dios, pensamientos negativos y maldad, Dios dice: “Sigo siendo Dios y mi pacto sigue estando vigente, aunque tú lo violes”. Cuando tenemos un pacto y creemos que está vigente, al caminar, los demonios se apartan. Tenemos el pacto de Dios sobre nosotros, y ese pacto toca todas las áreas de nuestra vida.

A los que se atrevan a soñar Dios les cumplirá su sueño. Hoy Dios quiere restaurar nuestros sueños y darnos esperanza para que ella le dibuje a nuestra fe lo que debe conquistar. ¡Levantémonos de los fracasos y empecemos a soñar y a creer nuevamente!