El verdadero servicio es dar lo mejor

Conoce la historia de una apasionada servidora de Maranatha Infantil

(Prensa Maranatha Venezuela 25 de noviembre de 2020).- Tuvimos la oportunidad de conversar con Yaribeth Rumbos, quien desarrolla su servicio en Maranatha Infantil como maestra, desde hace cinco años, y además es intercesora y fiel evangelizadora en El Evangelio Cambia,  específicamente en el municipio Los Guayos, de la entidad carabobeña, la cual nos abrió su corazón para hablarnos de su experiencia sirviéndole a Jesús.

Al preguntarle a Rumbos sobre qué es el servicio, no titubeó en decirnos: “Es dar lo mejor, así tengamos poco o mucho; es dar más allá de nuestras propias fuerzas, de los obstáculos; es ponernos en el lugar de los demás”. Y con lágrimas que corrían por sus mejillas, ya que al hablar de este tema su corazón se quebranta, nos dice que lo que la impulsa a brindar un servicio, es el amor por el prójimo, debido a que afirmó que: “Todos necesitan el amor de Dios, que Él les abrace y les de una palabra”, y confesó que al hacerlo puede evidenciar que así como Dios le ama a ella, ama a todos.

Rumbos nos contó que este año ha sido fuerte, tanto para ella como para su mamá, quien también es su compañera de servicio, pues, sufrieron la pérdida de dos seres muy queridos; Yaribeth perdió a su papá y a su abuelo, y aunque ha sido un golpe muy duro para ellas, pues aún lloran la pérdida de estos dos seres muy amados, Dios les ha dado las fuerzas para no detener su servicio de amor y la predicación de la Palabra de Dios, la motivación para hacerlo: “El amor a un Dios que se entregó por amor a nosotros, además, demostrarle ese amor primero a mi familia, pero también a todas las personas, y finalmente, porque a pesar de las adversidades, vienen grandes cosas para nuestro país” enfatizó.

Aunque son muchas las circunstancias difíciles vividas, Yaribeth nos cuenta que un momento de felicidad para ella, es cuando le nombran Maranatha Infantil; con una sonrisa dibujada en sus labios, que descubre su pasión por el trabajo con los niños, nos revela que unas de las actividades que más le gusta hacer, es realizarle los dibujos a los niños, pues, “al plasmar cada uno de ellos, el Espíritu Santo me habla, y me llena”, comentó que también ama enseñarles, cantarles y sobre todo, orar por ellos. Nos revela que espera con ansias el momento en el que Maranatha Infantil vuelva a funcionar, ya que debido a la pandemia, por ahora los niños no están recibiendo sus clases dominicales.

Rumbos, fiel servidora de Jesús, nos cuenta que el servicio le ha dejado grandes enseñanzas, la primera de ellas, a ser valiente, en segundo lugar, obediente, y en tercer lugar, a ser humilde, y que esa humildad no tiene nada que ver con vivir en un hogar con escasos recursos económicos, o no vestir ropa de marca, que esa humildad va más allá, es dar lo poco que podamos tener, pero que en las manos de Dios puede ser mucho. Declaró que su deseo es seguir aprendiendo de la Palabra, servir con excelencia y salir de Venezuela a predicar a otros países el mensaje de Jesús. Finalmente, con gran firmeza expresó desde su corazón: “Seguiré sirviéndole a Dios hasta que Él me permita estar en la Tierra”.