(Prensa Maranatha Venezuela 22 de septiembre de 2021).- La Iglesia Maranatha Venezuela, sede Valencia, realizó su servicio de jóvenes bajo el nombre “Por el trono”, que tuvo lugar en el auditorio principal de la Iglesia, y en el que se les comunicó a la juventud, que Dios desea llevarlos a puestos de poder e influencia a causa de su destino, pero que para cumplir ese propósito, se debe tener un corazón recto, dispuesto a traer el cielo a la Tierra. Dicho evento contó con alabanzas, adoraciones, obras de teatro y coreografías.

A la convocatoria asistieron mil doscientas personas provenientes de los municipios carabobeños, Carlos Árvelo, Guacara, Los Guayos, San Diego, y las distintas comunidades que conforman la ciudad de Valencia. Antonio Arcila joven asistente a la actividad afirmó: “Estoy muy contento de que volvieran los servicios de jóvenes, fue espectacular la obra y las coreografías, me emociona saber que otra vez podré asistir a estos eventos que bendicen en gran manera mi vida”.

El pastor Francisco Barrios compartió un mensaje basado en Mateo 13:34, explicando que el Reino de Dios es un misterio y no está a la vista, pero, es revelado a aquellos que lo buscan y no están interesados solo en sus beneficios. Barrios comentó: “La gente solo está interesada en las añadiduras del Reino, en lo que él les puede dar y no en conocer el Reino de Dios, en el que está la verdadera bendición”.

“El Reino ayuda a equilibrar los niveles de desigualdad social en el mundo”, aseguró el pastor, e hizo énfasis en que es necesario formar una generación de jóvenes libres y sanos de toda religión, para no tener que reparar adultos rotos en un futuro; y explicó que la Iglesia actual vive atacando la fe de Reino y han crecido en cantidad, pero sin conocer verdaderamente el Reino de Dios.

Más adelante, Simón Palma, asistente, expresó: “Entendí la importancia del Reino, de vivirlo y de traerlo a la Tierra”. Además añadió: “Debo pedirle a Dios que reine en mi corazón para traerlo a mi sociedad. Dios es un rey, y debemos quitarnos ese tabú de que como cristianos no podemos estar en lugares de poder, porque Cristo significa rey ungido, y somos hijos de ese rey”, concluyó.

La obra de teatro fue dirigida por la Escuela de Teatro de la Iglesia, en la que participaron jóvenes de los distintos municipios del estado. Por su parte, la coreografía fue creada por los jóvenes de la comunidad JEF de Guacara, quienes pudieron presentarse ante la audiencia que asistió al servicio.

De esta manera, la juventud de la Iglesia Maranatha vivió la experiencia de este servicio de jóvenes: Por el trono, cumpliendo con las medidas preventivas ante la propagación del Covid-19.